¿Por qué abrir mi oficina privada en un coworking y no en un espacio tradicional?

La palabra coworking es de uso muy reciente en nuestro país, es desconocida para muchos pero muy anhelada por la mayoría de personas que trabajan freelance o que tienen su agencia creativa.

Es un hecho que este tipo de necesidades de las marcas terminan siendo un gran esfuerzo para abrirse camino en el mercado, mostrarse como una marca estable y organizada, pero qué hay detrás de todo esto?

Muchas veces la infraestructura de nuestro proyecto hace que este tipo de necesidades termine por afectar la productividad y desenfocar a los profesionales del core del negocio, llevándolos a preocuparse más por el contrato que hay que firmar y los servicios que hay que pagar en vez de ver su marca evolucionar.

Para dejar de lado todo ese tipo de preocupaciones, hoy en día las marcas o freelancers pueden optar por instalarse en un coworking, sentarse cómodamente, disfrutar de una deliciosa bebida, generar conexiones y elevar sus índices de productividad.

Lo bueno de todo esto, es que encontrará un espacio privado pero, integrado a la filosofía colaborativa y con acceso a todos los servicios de que ofrecen este tipo de espacios. La idea es que el profesional se enfoque 100% en hacer que sus proyectos se prosperen, mientras el grupo de la comunidad de su coworking se encarga de la operatividad y las gestiones para que trabaje cómodamente.

Estos espacios son ideales para empresas con estructuras pequeñas, aunque hay ofertas para todos los tamaños en el mercado. Cuando te decides por una oficina privada en un coworking, tu marca se beneficia desde muchos puntos de vista: conocimiento continuo para tu equipo, networking para cerrar negocios y conseguir clientes potenciales, asesoría en diversos temas profesionales y hacer cada vez más visible tu marca.

Adriana Gutiérrez Ramírez

Comunicadora organizacional especialista en marketing

Fundadora Bloom Ecoworking

adrianagutierrez@bloomcoworking.com.co